LA BRECHA DIGITAL

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La implantación de las nuevas tecnologías a la educación se ha realizado en cada país, de forma diferente aún con particularidades dentro del mismo . El acceso a las tecnologías de la comunicación e información depende de múltiples variables, la primordial el acceso a internet está determinado por las condiciones de infraestructura tecnológica, asociada a una inversión importante y a los entornos de creación y desarrollo de la misma. 

Esa distancia que separa unos países de otros y unas sociedades de otras se denomina brecha digital. Se encuentra condicionada también por el sexo, la edad, el nivel de escolaridad, el nivel de ingresos, la raza.

Es por ello que uno de los aspectos que requiere reflexión, cuando se habla de la inserción de las TIC a la educación, es la inevitable diferenciación entre países, la supremacía de los más desarrollados, en detrimento de aquellos que se encuentran entre los mas pobres, rezagados del desarrollo. En los últimos, no se encuentra garantizado, ni siquiera el suministro eléctrico confiable, lo que nos muestra la distancia que separa a unos de otros.

En las sociedades será un motivo de exclusión y diferenciación social, el uso, dominio e implementación de las TIC, el impacto que tendrá en las condiciones y requerimientos del entorno laboral. El desarrollo de determinadas habilidades en los alumnos, que tengan acceso a ellas en su proceso de formación en comparación con los que carezcan de ellas.

El acceso y control de la información posibilita al ciudadano para la toma de decisiones y para su inserción en la sociedad, con ventajas competitivas.

Existe también una tendencia antagónica, que apunta a las desventajas de su implementación Según Angel San Martín “El cambio social proclamado con la implantación de las tecnologías de la información, no parece ser más que una quimera mistificadora con la que encubrir la realidad poco halagüeña. Los medios y las tecnologías aíslan al individuo de su entorno, mediante discursos sobre la realidad elaborados en clave universal, para servirlos a todos los ciudadanos por igual”.

Es evidente que existe un componente ideológico y de dominio en el acceso de dichas tecnologías, que implica cambios profundos en la forma que tenemos en la actualidad, de entender las relaciones sociales, los procesos educativos y las interrelaciones humanas. Una de las tareas  a acometer por los docentes es el planteamiento y reflexión de todos estos elementos, a fin de que su práctica pedagógica se inspire y proyecte en sólidas posturas de cara al futuro.

SAN MARTIN, A. (1995): La escuela de las Tecnologías. Valencia. Servei de Publicaciones de la Universitat de Valencia.